LA CONTAMINACIÓN ODORÍFERA ES UNO DE LOS PRINCIPALES PROBLEMAS DE LOS CENTROS SOCIOSANITARIOS.
En centros sociosanitarios y hospitales, es esencial mantener una buena higiene en todos los espacios y también de los residentes y trabajadores.
Pero no siempre la suciedad y contaminación se pueden apreciar a simple vista. En estos lugares se deben de dar una serie de factores que favorezcan el bienestar de las personas, como una correcta iluminación o contrarrestar la contaminación acústica, ya que los residentes de estos centros necesitan tranquilidad.
Como decíamos, hay otro tipo de problema que no se ve a simple vista pero está ahí. Hablamos de los malos olores y como consecuencia, de la contaminación odorífera. Los olores son los grandes olvidados en los centros sociosanitarios, pero representan una de las principales problemáticas medioambientales, puesto que resulta molesto tanto para los residentes como para los trabajadores.
Desde siempre, lo que hemos hecho es enmascarar los malos olores con ambientadores, pero la novedad reside en los nuevos productos inhibidores, que son aquellos que atacan el olor, lo neutralizan haciendo que se desintegren y desaparezcan por completo.
El éxito de este producto radica en la liberación en el ambiente de varios principios activos capaces de reaccionar en un estado gaseoso con todas las moléculas que causan la contaminación, además de su baja toxicidad.